....nuestra amiga Cuqui Ramírez, que nos ha recibido a la vuelta de su merecido descanso veraniego."Pues han sido cortitas. Sólo una semana. Pero quería que Ezequiel y los niños pasasen unos días fuera de nuestra casa. Eso sí: nada muy complicado, ni exagerado ni ostentoso. Un hotelito de 4 estrellas nos era más que suficiente. Una metrópoli histórica cerca era necesario. ¡Los pequeños deben ir conociendo mundo!
- Y Cuqui, ¿por qué Lisboa?"Pues ya sabes, grandes avenidas para pasear, esas tiendas que visitar, el Oporto que comprar, en fin una ciudad en ebullición, que a mi no estar en una gran urbe, ¡nunca me gustó! Se acostumbra una a Mairena y ya ...."
- Y ¿cómo empleabas el día?" ¡Pues como todo el mundo!. A primera hora hacíamos unos hoyos en el campo de golf del hotel, luego spa relajante, desayuno muy, muy, muy natural compuesto por huevos revueltos con huevos con beicon o cereales con leche y dos magdalenas..... En fin nada muy pesado."
- Y la playa, ¿qué?"Super, super, superfenomenal. Ya te digo: arena gruesa, agua color turquesa, daiquiris, que la cerveza engorda, ¿eh?, y luego vuelta al resort y otra vez a la tarde de Lisboa.
- Eres una excelente gourmet. ¿Qué tal las comidas?
"Muy bien. Muy bien. Francamente no nos lo esperábamos. Pero los chicos lo asumían con moderación. Entrantes, dos platos, postre, helados y claro, Ezequiel, para bajarse el morterón pues tenía que tomar un digestivo. O cinco. Sin planificar nada. Todo como nos ha venido."
- ¿piensas volver?"La próxima vez que venga. Sin duda. Porque todo ha ido super, super guay.
Gracias a nuestra amiga Cuqui por su sinceridad y modestia, al recibirnos tras su periplo vacacional. Más noticias en breve. 
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