VEMOS las reliquias de la santa.
Ubicadas en una hornacina iluminada en la sacristía. A la izquierda, destaca la imagen de la Santa, realizada por Fray Juan de la Miseria. Sin duda se han perfeccionado otros cuadros en cuanto imagen (ni la Santa se veía bien en él), pero el mérito es que sólo este cuadro tuvo como modelo, delante, a Santa Teresa.
Junto a él diversas reliquias como su meñique, un trozo de encaje,... Además la capa con la que murió, un ejemplar autografiado de 'Las Moradas', una zapatilla, ...... En fin, bastantes reliquias y recuerdos que se relacionan en la imagne siguiente.
Por último, otra curiosidad: el retrato de Teresita de Cepeda, sobrina de la Santa, novicia en el convento de Sevilla y primera Carmelita en América.
Hemos culminado la visita a Santa Teresa con un exhaustivo detalle. Hasta el año que viene.
"9. La diligencia que a mí se me ofrece más cierta (...), es andar con particular cuidado y aviso, mirando cómo vamos en las virtudes: si vamos mejorando o disminuyendo en algo, en especial en el amor unas con otras y en el deseo de ser tenida por la menor y en cosas ordinarias; que si miramos en ello y pedimos al Señor que nos dé luz, luego veremos la ganancia o la pérdida. Que no penséis que alma que llega Dios a tanto la deja tan a prisa de su mano, que no tenga bien el demonio que trabajar, y siente Su Majestad tanto en que se le pierda, que le da mil avisos interiores de muchas maneras; así que no se le podrá esconder el daño. "
Las Moradas del Castillo interior. Capítulo 4.9
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