El primer día amanecimos en Sevilla. Tras el desayuno, dos horitas y media de coche por la Ruta de la Plata, para llegar a Cáceres. Estación de paso para llegar al norte de Portugal.
A última hora de la mañana recorremos el casco histórico medieval de Cáceres. Entramos por el Arco de la Estrella, dejando a la espalda una Plaza Mayor en obras.
Los turistas visitan el Palacio Arzobispal y todos los monumentos relevantes del Casco Histórico.
Después de la siesta, hacemos otro recorrido porque siempre se queda algo atrás, con una invitada especial: la lluvia. Con una fuerte tormenta de verano.
Así que decidimos visitar la Con-catedral de Santa María, que podéis ver en la plaza que toma su nombre, mojada por la lluvia.
Cuando deja de llover, seguimos de paseo pero ya nos dirigimos hacia los soportales de la Plaza Mayor, donde cenamos, probando entre otras cosas, la torta del Casar.
Al acabar de cenar, un corto paseo de nuevo por el Casco Histórico para sacar instantáneas nocturnas.
Me gusta ésta del Arco de la estrella con la Plaza Mayor que se ve a través del arco. Y esta que estamos ante un edificio iluminado, con Mariceli estrenando las gafas que se ha comprado en las tiendas del centro de Cáceres.
Se acaba el paseo, vuelta al Hotel que está al lado de la Plaza Mayor...
Donde nos hacemos la últimas fotos de recuerdo.
Antes de irnos a la cama, que mañana vamos de viaje, con una mayor distancia.
Hasta mañana, buenas noches.
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